viernes, 6 de julio de 2007

Bueno, pues aquí se acaba. Tras más de dos meses de comunicarme con vosotros desde aquí, cierro este blog. Filipinas aún está fresquísimo en la memoria, pero algo me dice que el blog se acaba con mi viaje, y que siempre puedo empezar a inventar nuevas excusas para reuniros a todos por estos parajes.

Este viaje ha sido sin duda uno de los mejores de mi vida, y siento que me ha cambiado en muchos sentidos. No obstante, durante el tiempo que estuve en Manila también hubo muchos momentos de soledad, de miedo, de incertidumbre y de tristeza. Y aunque antes de irme no lo había imaginado así, escribir en este blog, hablar con vosotros y compartir un trocito de lo que estaba pasando, a menudo me mantuvo cuerda y tranquila. Escribir en él fue una manera de romper mi aislamiento y sentirme conectada a la gente que me importa.

Una nunca puede evitar crecer durante un viaje. Puedes elegir la medida del crecimiento, que depende de lo abierta que estés a ser cambiada por lo que te rodea, a ser tocada, pero no puedes evitar crecer. Es el viaje dentro del viaje, o lo que mi amiga Crispula llama el viaje por dentro. Este blog me ha permitido, semana a semana, compartir con vosotros quién soy y en quién me estoy convirtiendo, aunque fuera sólo un poquito. Tambíén me ha permitido dejarlo registrado, patente, para mí misma. Hacer a Filipinas más real y tomarme a mí misma más en serio. Correr el riesgo de pensar que alguien puede disfrutar oyendo lo que yo veo, pienso y siento.

Muchos sabéis que el blog es sólo una pequeña fracción de todo lo que he presenciado durante mis semanas en Manila. No creí que fuera el momento ni el lugar para denunciar las atrocidades e injusticias que están pasando en el país. Sentí que podría ser mucho más eficaz a largo plazo si me guardaba las espaldas, y sobretodo no quería provocarle un infarto a mi madre. Espero poder contároslo algún día en persona, con una cerveza, con un café, o simplemente con tiempo. Si sentís que os gustaría aprender más sobre lo que realmente está pasando en Filipinas, o lo que pasó cuando yo estuve allí, por favor, no dejéis que me lo guarde, recordadme que os lo explique. Porque contra más gente lo sepa mejor, y por otro lado... bueno, yo tampoco quiero olvidarme, que a veces es demasiado fácil cuando una se baja del avión...

Gracias por acompañarme en este viaje, por mirar desde el otro lado de la ventana.







No hay comentarios: